Reflexiones Sobre los Hechos de los Apóstoles:

EL ASUNTO DE LA AUTORIDAD...

 

 

--¿Con qué autoridad haces estas cosas?  ¿Quién te dio esta autoridad?^[16]

(Mat 21:23)

 

A tal grado había llegado la ceguera que La Mismísima Autoridad necesitaba pedirle permiso a ellos. Y según el contexto no le dieron permiso durante toda su vida. Siempre fue considerado rebelde a la autoridad, su vida nunca los complació, a tal grado lo reprobaron que Barrabás fue más digno a sus ojos.

 Lo mismo pensaron de sus apóstoles  y poniéndolos en medio,  les preguntaron: 

 --¿Con qué potestad o en qué nombre habéis hecho vosotros esto?^[5]

(Hch 4:7)

 

¿Cómo se atrevían a actuar sin el permiso de las autoridades religiosas? No tienen derecho de salirse del monopolio universal de la autoridad que habían hecho ellos.

Entonces en el escenario tenemos dos tipos de autoridades religiosas al mismo tiempo: la de Cristo y la de las autoridades religiosas. En un principio no estaban contrapuestas pues originalmente toda autoridad viene de Dios, pero ¿dónde se separaron?

 

Isa 14:14  “sobre las alturas de las nubes subiré

 y seré semejante al Altísimo".

 

Gén 3:5  “Pero Dios sabe que el día que comáis de él serán abiertos vuestros ojos y seréis como Dios,  conocedores del bien y el mal.

2 Crónicas 19:5-7 (Nueva Versión Internacional)

⁵ “En cada una de las ciudades fortificadas de Judá nombró jueces⁶ y les advirtió: «Tengan mucho cuidado con lo que hacen, pues su autoridad no proviene de un *hombre, sino del Señor, que estará con ustedes cuando impartan justicia.⁷ Por eso, teman al Señor y tengan cuidado con lo que hacen, porque el Señor nuestro Dios no admite la injusticia ni la parcialidad ni el soborno.»

Oseas 7:16
“No se vuelven al *Altísimo; son como un arco engañoso. Sus autoridades caerán a filo de espada por sus palabras insolentes”

 

Oseas 8:4
“Establecen reyes que yo no apruebo, y escogen autoridades que no conozco”.

 

Sofonías 3:3
“Las autoridades que están en ella son leones rugientes, sus gobernantes son lobos nocturnos que no dejan nada para la mañana”.

 

¿A cuál de ellas le rendiría Ud. obediencia y sumisión? ¿Cuál sería su “cobertura espiritual” como le llamamos ahora.

 

La ”enseñaza de los apóstoles” es:

 

“Pero Pedro y Juan replicaron:  --¿Es justo delante de Dios obedecerlos a ustedes en vez de obedecerlo a él?  ¡Júzguenlo ustedes mismos!”

(Hch 4:19)